Detective Peter Harper

Es normal hacer conjeturas basadas en ciertos indicios. Algunos creen en las intuiciones, revelaciones o visiones, en los presagios y en la premonición.   Yo no.  Y como este libro se trata de premoniciones, estuve a punto de dejar de leerlo.  Pero me atrapó el ritmo rápido y ágil con que el narrador describe el ambiente de una playa irlandesa, al mismo tiempo que va contando, sorprendido por su misma incredulidad, lo que está pasando en su interior, en las visiones o premoniciones que cree tener y sufrir.  En ese ambiente exterior y a partir de sus premoniciones se va armando y descubriendo un suceso criminal que lo involucrará a él y a sus dos hijos y a nosotros en un muy entretenido y bien logrado thriller psicológico.

La última noche en Tremore Beach es la primera novela de Mikel Santiago (España, 1975),  está escrita en español pero ambientada en una playa del noroeste de Irlanda. Está narrada en primera persona por el protagonista Peter Harper, que como el autor, también es creador, pero de música:

 La creación…  He oído que algunos escritores lo llaman el túnel. Algo que se abre, mágicamente, en sus cabezas y les permite viajar hasta un lugar donde las historias, los hechos y sus personajes se describen con claridad. Entonces el escritor solo actúa como cronista de lo que ve. Escribe o teclea tan rápido como es capaz para no perder detalle, antes de que la puerta vuelva a cerrarse…. La ciencia de la inspiración no es muy diferente para un músico. En mi caso, yo hablaría de algo que «viene del cielo», no me pregunten por qué, pero siempre he pensado que «eso» viene del cielo, como una revelación.
 
¿Es esa voz? ¿Otra vez? En toda mi vida, hasta ese momento, solo la había oído en otra ocasión. Tan nítida, tan clara en su mensaje…» 

Peter Harper de cuarenta y ocho años, es un famoso compositor irlandés de música contemporánea que atraviesa un periodo de crisis individual y de creación; está deprimido y busca refugio en Tremore Beach, una pequeña playa en la costa noroeste de Irlanda, en el condado de Donegal. Tiene dos hijos, Beatrice de trece años y Jip de ocho. Viven en Ámsterdam con su ex-esposa Clem y su pareja, un prestigiado arquitecto e irán a pasar un par de semanas de vacaciones con su padre a Tremore Beach, la playa donde sólo hay dos casas, la que él ha rentado y la de Leo Kogan, un detective de hotel retirado y de su esposa  Maire.

Todo empieza una noche con presagios de tormenta. Sus vecinos lo habían invitado a cenar y al salir de su casa Peter cree escuchar una voz que le advierte no salir. Regresa a su casa cuando la tormenta ha estallado y se topa con un tronco atravesado en el camino; sabiendo que es una imprudencia, sale del coche para moverlo y recibe el impacto de un rayo.  Despierta en el hospital con las lesiones de quienes han sufrido ese accidente, la mayoría de las veces fatal.

A partir de entonces Peter sufre de fuertes dolores de cabeza, pesadillas, periodos de sonambulismo y visiones, posiblemente le dice la doctora, disparadas por el shock eléctrico del rayo. Días después va a recoger a sus hijos al aeropuerto de Dublin y pasan dos días con su padre viudo que vive en esa ciudad. En casa de su padre tiene otra visión, se ve leyendo el titular del periodico Irish Times con la noticia del asesinato de cuatro personas en Donegal.

De regreso a Tremore Beach Peter y sus hijos disfrutan la playa, las visitas al pueblo cercano de Clenhburran, la amistad de la joven Judie Gallaher, dueña de una tienda-posada y las invitaciones de los Kongan. Peter sigue sufriendo fuertes dolores de cabeza, pesadillas, alucinaciones y visiones.  ¿Premoniciones? Se pregunta ¿Tiene la capacidad de conocer hechos con anterioridad? Su madre la tenía y parece que también su hijo de ocho años.  Hasta que se van sucediendo los sangrientos hechos en esa última noche en Tremore Beach.

[Ver reseña de El hijo olvidado]

Autor Mikel Santiago. Portugalete, Vizcaya, País Vasco, España, 1975.

Ficha Mikel Santiago, La última noche en Tremore Beach.  España: Ediciones B.(B de Books). Kindle Edition. 2014. 424 págs.