Coronel Palacios

F.G. Haghenbeck fue un escritor versátil: novela policiaca, novela histórica, novela fantástica, biografías noveladas, y guionista de cómics.

Aliento a Muerte es una novela policíaca que se desarrolla en 1868, un año interesante porque marca el fin de la invasión francesa (entre 1863 y 1867) y el retorno a la República.  Adrían Blanquet regresa a Tehuacán, en el estado de Puebla y tanto él como el gobierno y las personas se tendrán que acomodar a la nueva realidad y a un nuevo orden. Blanquet era hijo de un rico hacendado, luchó en el ejército imperial, por lo que fue apresado y condenado a muerte por traición a la patria, pero intereses políticos y económicos coyunturales le salvaron la vida, pero no el honor.  A su regreso encontró que su familia había perdido la hacienda El Ahuizote y que su padre y su esposa habían muerto, y se empeña en saber que fue lo que pasó desde su salida en 1865. En su búsqueda por la verdad, con la ayuda de un simpático cocinero enano de origen francés, se enfrenta con el pueblo y con el caudillo David Díaz Ceballos. La venganza le hace huir a la capital donde lo encontrará el muy obstinado detective, el Coronel Palacios.

Para crear el ambiente del efímero “Segundo Imperio”, Haghenbeck ilustró cada capítulo con la ficha de alguna de las piezas exhibidas en una exposición temporal de objetos de la colección privada Roth- García, “El Imperio efímero: artes y objetos en tiempos del Imperio de Maximiliano».

 

Sunny Pascal

F.G. Haghenbeck escribió tres thrillers con su personaje Sunny Pascal, un “sabueso beatnik… Mitad en todo: mitad mexicano, mitad gringo, mitad alcohólico, mitad surfer; mitad vivo, mitad muerto..”.  Vive en los Ángeles, son los años sesenta y su trabajo es “cuidar artistas hollywoodenses”, ya sea en Acapulco (El caso tequila, en Puerto Vallarta (Trago amargo) o en Madrid (Por un puñado de balas).

Para crear el ambiente de las aventuras de este “sabueso beatnik”, Haghenbeck  titula cada capítulo de estos thrillers con el nombre de un cóctel. Incluye los ingredientes, la forma de preparación, su posible origen, los personajes famosos que los bebían y con qué canción se escuchan.  Breves introducciones para reposar de las crudas borracheras y del acelerado ritmo de la lectura.

Igual de placenteros son los epítetos que Haghenbeck inserta para caracterizar (más que calificar) cosas, gentes o situaciones y que nos hace soltar la carcajada por su originalidad e ironía. Por ejemplo, en su dedicatoria a Silvia “….por el cariño, el apoyo y el haber tomado prestado parte de su vida para esta novela. Prometo devolverla cuando la deje de usar”.

Trago amargo se desarrolla durante la filmación de la película “La noche de la iguana”, basada en la obra del mismo nombre del escritor americano Tennessee Williams, rodaje que en 1964 haría famoso a Puerto Vallarta. El director de la película fue John Huston y los actores principales Richard Burton, como el sacerdote anglicano alcohólico que se retira a vivir a México, Ava Gardner, Deborah Kerr y Sue Lyon.  Dada las personalidades explosivas de los actores, John Houston les había regalado un revólver con balas doradas en las que estaban escritos los nombres de cada uno de ellos, por si las necesitaban.

Sunny Pascal es contratado por el productor de la película, Ray Stack, “por si pasa algo” durante la filmación en la playa virgen de Mismaloya. Ahí, su trabajo no era muy diferente a no hacer nada, pasaba el tiempo sentado en un bar, viendo cómo llegaban los actores, entre ellos Richard Burton acompañado de Elizabeth Taylor; en ese momento tal vez la pareja más famosa del mundo. Con epítetos precisos e irónicos va describiendo al elenco y a sus acompañantes como la entonces jovencísima Sue Lyon y, por supuesto Emilio el “Indio” Fernández y Gabriel Figueroa.

En Trago amargo hay exceso de todo: alcohol, sexo, droga, violencia. sobredosis, violación, el robo de un rollo de fotografía y del anillo de esmeraldas de Elizabeth Taylor. Hay guardaespaldas y el Sargento Quintero de la policía local y hasta aparece el tristemente célebre abogado mexicano Bernabé Jurado.

El caso tequila sucede en la maravillosa bahía de Acapulco de los sesenta, su mar, su clima, su costera, las playas, las residencias, el ambiente de turistas nacionales y extranjeros, el clima, el glamour hollywoodense durante la “Reseña mundial de cine”, todo, lo que hicieron de Acapulco un verdadero paraíso, con adanes, evas, serpientes y muchas manzanas que morder.

Sunny Pascal es contratado para ver qué estaba pasando con Johnny Weissmuller, “Tarzán”, uno de los dueños del paradisiaco hotel Los Flamingos.  Ann Margaret, John Wayne y Frank Sinatra aparecen en este thriller, y también agentes cubanos, de la CIA y del FBI, involucrados con la situación cubana y con el asesinato de Kennedy. Y por supuesto las autoridades acapulqueñas y los políticos mexicanos como Mario Moya Palencia quien durante la presidencia de Miguel Alemán jugueteó con la idea de instalar casinos en el puerto. Completan el cuadro los secuaces de la mafia de Sam Giacana.  Muchas cosas pasan, Haghenbeck hace que todos los personajes se relacionen entre sí, pisándose los talones, embaucándose y traicionándose a tal velocidad que nosotros, los lectores, tenemos que correr detrás de ellos para tratar de alcanzarlos.

En El caso tequila” también hay mucho de todo: portafolios repletos de dólares, alcohol, crítica política, chismorreo, violencia, sexo y por supuesto ¡cadáveres!

La acción de Por un puñado de balas sucede en 1964. Sunny Pascal es contratado por los estudios Churubusco y ni más ni menos que por Luis Buñuel, para ir a Madrid e investigar el asesinato de Imelda Fregoso durante la guerra civil española.  Sunny Pascal bebe martinis con Buñuel quien le ordena que mate a Dalí y quien nos deja su receta de preparar martinis, y participa como doble en el rodaje de la película en Almería con Clink Eastwood.  En este thriller también hay de todo, pero ahora en Madrid.

Matar al candidato es una novela gráfica en la que F.G Haghenbac es el autor del guion  y Bernardo Fernández, Bef es el autor de los dibujos. Esta novela gráfica es un “true crime” sobre el asesinato de Donaldo Colosio, el candidato a la presidencia por el Partido Revolucionario Institucional. El 23 de marzo de 1994. Con el antecedente de otro genocidio, el de Álvaro Obregón. El 17 de julio de 1929.

Francisco Gerardo Haghenbeck. Ciudad de México. 1965-2021.
F.G. Haghenbeck,  Aliento a muerte. México: Planeta. 2009. 206 págs.

F.G. Haghenbeck. Trago amargo. México: Roca Editorial.  2009. 140 págs

F.G. Haghenbeck. El caso tequila. México: Roca Editorial.  2011. 219 págs.

F.G. Haghenbeck, Por un puñado de balas. México: Océano. 2016. 264 págs.

Bernardo Fernández, Bef y F.G. Haghenback. Bernardo Fernández, Bef y F.G. Haghenback.  «Matar al candidato».. México: Editorial Sexto Piso. 2019. 59 págs.