Detective CHICALaidlaw

Laidlaw (1977) de William McIlvanney, (Escocia 1936-2015), inicia el estilo “Tartan-Noir”.  Son novelas que narran crímenes, escritas por escoceses y ambientadas en Escocia.  En ellas convergen la tradición literaria escocesa y la influencia del estilo “hard-boiled” de los escritores norteamericanos.  Hacen énfasis en la atmósfera, en los diálogos y en las cavilaciones. Se narra con el ritmo lento de los diálogos en los pubs y se reproduce el habla local, lleno de palabras provenientes de la jerga de las clases sociales menos favorecidas.  Parece ser que fue James Ellroy quien acuñó la frase “tartan noir”, cuando describió a Ian Rankin como el “rey del tartan noir”. “Tartan” es la tela con diferentes diseños de cuadros y colores característica de Escocia. Otros escritores de este grupo de ficción negra escocesa son Denise Mina (Escocia 1966), Ian Rankin y Val McDermid.

Laidlaw transcurre en el Glasgow de los setenta. Cuando se hablaba por teléfono en las cabinas telefónicas y los cientos de “pubs” de la ciudad eran (o siguen siendo), más que un lugar para beber, el lugar más importante de encuentro o de reflexión.  Se vive en un ambiente de intransigencia religiosa y homofóbica. Era un mundo de hombres, las mujeres sólo aparecen como víctimas.

Laidlaw es la primera de tres con Inspector Detective Jack Laidlaw de la División Central de Homicidios de Glasgow. Las otras son The Papers of Tony Veitch (1983) y Strange Loyalties (1991).

 “What?’‘Serendipity. The art of making lucky finds. The art is in knowing they’re finds”.

 Me gustan las cavilaciones del Inspector Detective Jack Laidlaw, un detective poco convencional, con una naturaleza llena de paradojas, podía ser violento y odiaba la violencia, creía en la fidelidad y era infiel. Tiene cuarenta años es padre de tres hijos pequeños y vive un mal matrimonio con Ena.

 “In the room Laidlaw took another drink. He was thinking, not for the first time, how a given context precipitated definition”.

Laidlaw busca a un asesino que corre espantado por el crimen que cometió. Sabemos quién es él y a quién asesinó.  ¿Podrá la policía o Laidlaw encontrarlo antes de que lo mate alguna de las personas que lo buscan? 

En Kelvingrove Park se había encontrado el cuerpo sin vida de la joven de dieciocho años Jennifer Lawson. Había sido violada y asesinada. Bud Lawson es el padre de Jennifer, un protestante “monolítico”, en búsqueda del asesino.  Sabía que ella se veía con un católico y que la noche anterior a su desaparición había ido a la discoteca Poppies. Los dueños de la discoteca eran Harry Rayburn y Matt Masson. Masson contrata a un enfermo terminal de cáncer para que mate al joven asesino, quiere evitar que lo asocien con Harry Rayburn. “That lassie in the papers. Fella that killed her. In the tenement. Up at the top. Minty gonny get rid o’ ’im the night. Minty’s got cancer”.

 El joven asesino también es buscado por el gánster más importante de la ciudad y por el equipo del comandante Milligan de la División Central de Homicidios de Glasgow.  Pero Milligan había dispuesto que Laidlaw y el joven detective Harkness realizaran una investigación paralela.

«Milligan…, Laidlaw had been wondering if it was possible to be a policeman and not be a fascist».

 

Autor William McIlvanney. Kilmarnock, Escocia, 1936-2015.

Ficha William McIlvanney. Laidlaw. Nueva York: Europa Editions. 2014. 24 págs. Kindle Edition.