Fionnlagh –Finlay-Fin- Macleoid
“The Lewis Trilogy” del escritor escocés Peter May (1951) ccomprende los libros Blackhouse, The Lewis Man and The Chessmen, publicados en 2011, 2012 and 2013 respectivamente.
Hay novelas que son una ventana a una realidad diferente a la nuestra. Otras ofrecen una gran historia. Algunas crean retratos del alma humana. Otras deleitan por la maestría en el lenguaje. Pocas describen los ambientes naturales. Algunas reúnen todo.
The Lewis Trilogy es una historia novelada a manera de saga, de pobladores principalmente de la “Isla de Lewis”, una isla en las Hébridas Exteriores.
El telón de fondo son las islas del archipiélago de las Hébridas Exteriores escocesas, el archipiélago más importante al oeste de Escocia y del Reino Unido. Una cadena de más de mil islas pequeñas. Su paisaje está formado por ríos y lagos (“louch” la palabra gaélica para lago), rocas, montañas y acantilados. El clima siempre es húmedo, lluvioso, frío, gris, sin color. Y siempre expuesto a mareas y vientos.
En la trilogía confluyen las historias de sus pobladores, la historia de las islas, y las tramas del thriller. Pequeñas comunidades de hablantes de gaélico, una variante céltica originaria de Irlanda. Los crímenes no son políticos, financieros o mafiosos, son delitos originados en la malicia interna que todos podemos tener, en esa inclinación a la mezquindad que aflora en determinadas circunstancias.
Las muchas historias de esta trilogía son narradas por el detective Finlay Macleod y un narrador en tercera persona. Las narraciones se alternan entre los recuerdos, el origen y evolución de los conflictos hasta su desenlace. Historias que extraordinariamente se amalgaman con la historia social, natural y con la geomorfología de las islas.
Macleod trata de resolver sus casos con el convencimiento de que los crímenes no se pueden aclarar si no se llega a las partes más ocultas de la personalidad humana, conocer el pasado teniendo siempre presente la convivencia con una naturaleza hostil.
Blackhouse (2011)
El título de Blackhouse, hace referencia a las antiguas construcciones de la isla de Lewis, de paredes ennegrecidas por el fuego de la turba, “peat”, que ardía noche y día para calentar los interiores que albergaban a las personas y a sus animales. La turba es una especie de masa que se forma por la putrefacción y carbonificación de la vegetación en pantanos, marismas y humedades.
Finlay-Fin- Macleod era detective de la policía de Edimburgo. Había nacido y crecido en la pequeña comunidad de Crobost, en la Isla de Lewis. Habló gaélico hasta que entró a la escuela primaria y aprendió el inglés. Sus padres murieron en un accidente automovilístico cuando él tenía ocho años. Vivió con la hermana mayor de su madre hasta que dejó la isla para ir a la universidad en Glasgow.
Macleod regresó a la Isla de Lewis después de dieciocho años, en un muy mal momento de su vida; su hijo de ocho años había muerto atropellado semanas antes y se había separado de su esposa. Su superior lo había comisionado para conocer los detalles de un asesinato que presentaba similitudes con un caso en el que había trabajado, además él había conocido a la víctima Angus, “Angel” Macritchie.
El Sargento George Gunn de la policía de Stornoway, la mayor ciudad de la isla, lo introduce a los pormenores del asesinato de Angus Macritchie. Macleod conocía bien a Angus y a sus hermanos, famosos por su temperamento violento y tendencia a “bulear” a los compañeros de la escuela. Había dos sospechosos, Chris Adams, miembro de un grupo de protección a los animales que estaba en la isla protestando por la tradición centenaria de la caza anual de las “guga”, el nombre en gaélico de las aves conocidas en español como alcatraces, del género morus (gannets en ingles), en el islote de Sùla Sgeir. Doce hombres del pueblo de Crobost, el pueblo de Macleod, viajaban cada agosto al islote donde permanecían dos semanas cazando y preparando las aves cuya carne era considerada un manjar.
El segundo sospechoso era el ministro de la Iglesia Libre de Crobost, el reverendo Donald Murray, amigo y compañero de la infancia. Su hija Danna, de dieciséis años, había acusado a la víctima, Angus, “Angel” Macritchie, de haberla violado.
En esta primera parte de la saga, Macleod se reencuentra con uno de sus mejores amigos de la infancia, Artair Macinnes. Se sorprende que Artair Macinnes se hubiera casado con su antigua novia, Marsaili y que el hijo de ambos, de diecisiete años, se llamara como él, Fionnlagh. El padre de Artair había sido el maestro de la Escuela de Crobost donde los niños cursaban los primeros siete años de la primaria y los dos primeros de la secundaria.
Macleod había sufrido un accidente en la “roca” durante la tradicional caza de alcatraces. Por esos recuerdos que nadie debería conocer, el asesino de Angel Macritchie había preparado durante dieciocho años sus crímenes.
“You killed Angel Macritchie just to get me here.”
“I knew it wouldn’t take you long to work that one out, Fin. You always were too fucking smart for your own good.”
The Lewis Man (2012)
The Lewis Man, podría resumirse como la historia de una “vendetta”, la forma primitiva de las mafias para vengar afrentas a través de generaciones. Venganzas que amenazan la vida de la recién nacida hija de Fionnlagh Macinnes y Danna Murray.
Con el mismo estilo exuberante y detallado con el que describe la naturaleza y el clima de la isla, este caso va presentando las conductas y posibles pensamientos de un enfermo de Alzheimer que recuerda su infancia. Había sido un “homer (niños y niñas de orfanatorios católicos que eran enviados a vivir con familias de las islas).
Macleod renunció a su puesto de detective en la policía de Edimburgo y finalizó su divorcio con Mona. De regreso a la isla frecuenta a Marsaili, su compañera de primaria, novia de juventud y a la que había traicionado en los primeros meses que vivieron juntos cuando estudiaban en Glasgow. Marsaili se había casado con Artair Macinnes. Su hijo Fionnlagh recién había tenido una niña con Danna, la hija del Reverendo Murray, otro de los amigos de la infancia.
Cuando un grupo de personas estaba cortando la turba para proveerse del combustible que necesitarán para el invierno, se encontró un cuerpo humano ennegrecido y envuelto en una manta.
Según el examen forense, el cuerpo correspondía a un joven de unos veinte años, de raza caucásica, tenía un tatuaje de Elvis Presley en el brazo, un implante en la cabeza de los que se usaban en los años cincuenta para las craneoplastías, posiblemente realizada unos años antes de su muerte, Había fallecido por un corte en la garganta y varias puñaladas en el pecho. Se realizaron comparaciones de su ADN con la base de ADN de los hombres de Lewis. El resultado reveló una relación consanguínea con Tormod Macdonald, el padre de Marsaili.
Termod Macdonald estaba internado, había perdido la memora inmediata, ni su esposa Mari ni su hija Marsaili sabían nada de su pasado. Finlay Macleod se ve involucrado en la investigación a pesar de ya no pertenecer a la policía.
Por el diseño de la manta que envolvía el cuerpo del joven, Macleod descubre que provenía de la isla de Harris y según el acta que le había entregado Marsaili era el lugar de nacimiento de Tormod Macdonald. Las mantas tejidas de la isla de Harris son famosas por sus diseños; tradicionalmente, cada familia tiene su propio diseño. Lewis y Harris son partes de una sola isla separadas por montañas y múltiples y diversas formas de entradas de agua. En Harris Macleod descubre que el diseño pertenecía a la familia Gillies, una de las familias que habían acogido “homers” antes de que en los años sesenta se prohibiera la práctica. Macleod encuentra un acta de nacimiento a nombre de Tormod Macdonald, nacido en 1939, hijo de Donald y Margaret, ahogado accidentalmente en 1958. “Si el padre de Marsaili no era Tormod Mac Donald, entonces ¿quién era?
Con mucha paciencia Macleod logra que Tormod vaya verbalizando la realidad paralela en la que vivía por el Alzheimer. Va a Edimburgo. Investiga en un orfanatorio. Visita a un descendiente de la familia Kelly que continua la actividad mafiosa de sus padres y abuelos.
The Chessmen (2013)
En la isla de Lewis se encontraron setenta y ocho piezas de ajedrez talladas en marfil de morsa, con singulares expresiones de asombro en los rostros, y catorce tableros de ajedrez. Posiblemente de origen escandinavo del siglo XVII. Están resguardados en el Museo Británico de Londres.
Finlay Macleod ya vive en la isla de Lewis. Parece tener una relación estable con Marsaili. Trabaja como jefe de seguridad del desarrollo inmobiliario Red River cuyo administrador es otro de sus amigos de la juventud, Kenny John Maclean. La inmobiliaria maneja más de cincuenta mil acres con extensos ríos, lagos y entradas de agua; el negocio más importante de la inmobiliaria es la pesca del salmón y la trucha.
Entre sus responsabilidades estaba perseguir a los pescadores furtivos o ilegales, localizar y desalojar usurpadores. Uno de ellos era John Angus Macaskill, “Whistler”, otro compañero de secundaria en el instituto Nicolson de Stornoway.
Whistler vivía en una decrépita granja lejos de todo. Su infancia fue triste, no quiso seguir estudiando. Su esposa lo había abandonado por Kenny John Maclean; se llevó Anna, la hija de ambos. La madre murió. Whistler y Kenny se encontraban en medio de un juicio por su custodia. “Pero he tallado mi propia, secreta venganza” le dice a Finlay. Entre las muchas habilidades de Whistler estaba la talla de la madera y él había reproducido las piezas del ajedrez de Lewis que se encontraban en el Museo Británico, más grandes que las originales; en uno de los cuatro de los alfiles había reproducido la cara de Kenny.
Una noche de tormenta Finlay y Whistler se refugiaron en una cueva en lo alto de una colina. Al amanecer salieron de la cueva, en medio del lecho seco de un “loach” había una avioneta. Los dos reconocieron la avioneta del músico Roddy Mackenzie quien había desaparecido diecisiete años atrás. Roddy había sido amigo y compañero de la juventud de ambos. En Glasgow Whistler había tocado la flauta en la banda de Roddy, Sòlas, y Finlay había ayudado en los traslados del equipo de la banda. En la cabina de la avioneta encontraron un cuerpo. Finlay se sorprende por la reacción de Whistler quien huye despavorido. Él llama al sargento George Gunn de la policía de Stornoway.
Finlay tiene conflictos con el dueño de la inmobiliaria y con Kenny. Renuncia a su trabajo. Vuelve a la granja de Whistler, lo encuentra tirado en el suelo en medio de un charco de sangre, alguien lo había golpeado en la cabeza.
Finlay investiga los dos homicidios, el de Whistler y el del hombre encontrado en la avioneta que presume era Roddy Mackenzie.
Peter May. Glasgow, Escocia. 1951.
Peter May. Blackhouse. New York, London: Quercus. 2013. 432 págs. Kindle Edition.
Peter May. The Lewis Man. New York, London: Quercus. 2014. 443 págs. Kindle Edition
Peter May. The Chessmen. New York, London: Quercus. 2015. 386 págs. Kindle Edition
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